Es muy fácil hablar. Es más fácil aún insultar. Yo he dado mi opinión sobre lo sucedido en Gaza y he condenado el accionar del gobierno de Israel. He recibido algunos correos en los que se me insulta y se me ha dicho que eso se debe a que soy antisemita y por eso me he casado con un alemán nazi. Bien, quiero decir que la cosa no es así. No es mi intención hace una etnogénesis acá, pero creo que hay algunas cosas que debo decir.
1.- Mis bisabuelos maternos eran judíos de Tánger que llegaron a Perú en un barco. Mi abuela era Ana María Pérez Bisror (ese era su apellido semita)
2.- El papá de mis hijas es alemán pero no todos lo alemanes son (o han sido) nazis (y de ser nazi se hubiese casado con una aria no con una peruana). Su padre era niño en la época de la guerra y perdió a su hermano de 18 años a causa de lo absurdo de las guerras. El papá de su mamá era un general italiano que estuvo en un campo de concentración porque no se quiso poner bajo las órdenes de Mussolini.
3.- Condenar los ataques de Israel en Gaza no es ser antisemita. «Semita» es un término que se utilizó originalmente en el ámbito lingüístico para referirse a una familia lingüística. El grupo incluye a los árabes, arameos, judíos y etiopes. Visto así, tan semitas son los árabes como los judíos.
Ver:
Uso político del antisemitismo